Ministerio de Desarrollo Social trabaja en el eje de Seguridad y Paz Social para Collipulli y Ercilla
Un tema de gran importancia para el gobierno del presidente Sebastián Piñera, y para el Ministerio de Desarrollo Social, en particular, es la construcción de una política indígena participativa y de mayores oportunidades para los pueblos originarios y las comunidades indígenas, que representan más del 7% de la población chilena.
Hasta el año 2009 la política indígena estuvo centrada en la población rural, principalmente en la compra y entrega de tierras, pero sin apoyo al desarrollo productivo ni al mejoramiento de las condiciones de habitabilidad. Por ello, no es sorpresivo que entre los años 2000 y 2009, la población indígena rural no presentara mejoras significativas en sus condiciones socioeconómicas, ni se haya puesto el énfasis en la población indígena urbana.
Hasta el año 2009 la política indígena estuvo centrada en la población rural, principalmente en la compra y entrega de tierras, pero sin apoyo al desarrollo productivo ni al mejoramiento de las condiciones de habitabilidad. Por ello, no es sorpresivo que entre los años 2000 y 2009, la población indígena rural no presentara mejoras significativas en sus condiciones socioeconómicas, ni se haya puesto el énfasis en la población indígena urbana.
A partir de 2010 se ha cambiado el foco, centrándose en el desarrollo de una sociedad de oportunidades que entregue herramientas que permitan a las comunidades indígenas trabajar sus tierras, capacitarse y fortalecer su cultura.
Dentro de los avances destacan tres ejes fundamentales. Primero, el Desarrollo Social y Productivo, que consiste en la entrega de tierras acompañada de un proceso de desarrollo, que les permita explotarlas económicamente y no dejarlas abandonadas. En esa línea también destacan las alianzas productivas con empresas que tienen un alto desarrollo tecnológico.
En segundo término está la Educación e Identidad Cultural, que por una parte busca reconocer en la Constitución Política a los pueblos originarios y su aporte a nuestra identidad como país y, por otra, promover elementos como la educación, salud, cultura y por sobre todo preservar la lengua de los pueblos originarios.
Por último, en el eje de Seguridad y Paz Social se ha trabajado en la conformación de nuevas Áreas de Desarrollo Indígena en Ercilla y Collipulli, además de múltiples coordinaciones con el Ministerio del Interior y Seguridad Pública, Carabineros e Investigaciones, en vías mejorar la seguridad de las comunidades y sus entornos.
Buenas y esperanzadoras noticias en materia de Política Indígena, con un marcado énfasis en la participación y diálogo efectivo, destacando medidas que no sólo apuntan a dar protección social, sino que también a promover y entregar herramientas para que cada persona pueda soñar un futuro mejor en un clima de paz.
Diario Financiero
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